Reconozco que no me gusta hablar de política y mucho menos escribir sobre ella. Creo que los políticos están para cumplir con su deber que es defender nuestros intereses y los periodistas especializados están ahí para analizar, criticar o ensalzar. Yo la carrera de Ciencias de la Información la estudié con otro objetivo: Quería entretener a la gente, hacer una televisión divertida. Es por eso por lo que hoy no hablo como periodista, sino como ciudadano.
La vida, la situación actual y las circunstancias me han llevado a vivir fuera. Hace unos meses dejé mi país para emprender una aventura profesional en México, a miles de kilometros de distancia.Me gusta mi país, amo España, adoro sus ciudades, su comida, sus costumbres y su gente, pero en estos momentos este país no pasa por sus mejores momentos y he decidido probar suerte y buscarme un futuro mejor en el extranjero. Vuelvo siempre que puedo, leo la prensa española desde la distancia, no quiero otra nacionalidad, me siento orgulloso de ser español, pero insisto que la situación del país me ha obligado a salir de mi tierra.
Estas Navidades volví a pasar las fiestas con toda la ilusión del mundo. Vine encantado y feliz, con ganas de pasar estos días en familia y con mis amigos. Fue un reencuentro único lleno de lágrimas de alegría, han sido unos días maravillosos en los que aprecio lo mucho que tenemos en este país. Sin embargo leo la prensa, los confidenciales y me horroriza lo que "algunos" hacen con este maravilloso país. Hoy he leído que en mitad de las Navidades, cuando la gente está menos pendiente de la actualidad porque en estas fechas no queremos malas noticias, se aprueba un decreto por el cual todos los que estamos emigrando, los que salimos a buscar un futuro mejor, los que salimos a trabajar o a estudiar al extranjero porque nuestro país no nos da en estos momentos lo que necesitamos, perdemos el derecho a la sanidad, es decir que parece que para "algunos" lo mejor es quedarse aquí muriéndose de hambre al no tener paro ni ningún tipo de pensión que viajar, parece que "algunos" apoyan más que la gente viva mendigando o cometiendo delitos que luchando por una vida mejor. A quien corresponda sólo le pido que me explique estas medidas ya que, por si no lo saben, no hay nada más digno que trabajar, y si el país de uno no le puede dar trabajo, es mejor buscarse la vida fuera que no tener para comer. Les aseguro, ya que ustedes tienen billetes de avión gratis, o todos los ciudadanos les pagamos con nuestro dinero sus billetes para viajar, que no es fácil estar lejos de casa de uno, que las lagrimas, la distancia, la soledad y los malos momentos no tienen precio, y encima ustedes, "nuestros representantes" nos quitan la sanidad, esa que hemos pagado durante años y años con nuestros impuestos. Pues por mucho que se empeñen no nos van a echar de nuestro país, seguimos siendo españoles, aunque no vivamos de sueldos vitalicios pagados por los ciudadanos, no tengamos coches oficiales pagados con nuestros impuestos...
¿Dónde esta mi país? Ese de siempre, ese en el que la gente era alegre, ilusionada y optimista. Ese en el que no había ex-presidentes que nos llevaban a crisis profundas negando lo que era evidente. Ese país en el que los que estaban se cargaron las bases de nuestra sociedad y los que les sustituyeron ahogan a la sociedad hasta puntos insospechados. Quiero ese país en el que el Teatro y el cine eran considerados como cultura y no tenían un IVA desorbitado que llevaba a cientos de amigos actores, técnicos o empresarios a la calle. Donde está ese país en el que los medios de comunicación informaban y no eran instrumentos de nadie. Ese país en el que no se aprobaban leyes con las que sería difícil informar de corrupción. Ese país en el que los ex-ministros y ex miembros de gobiernos del pasado no tienen sueldos de por vida desorbitados mientras a la gente se le quitan sus casas (lo de Leire Pajín me parece vergonzoso, pero ella es solo la primera de las muchas que se van a beneficiar de leyes injustas)
A los que se fueron y a los que están, a los que destruyeron y a los que ahogan, a todos ¿Dónde está mi país? Quizás sea el momento de dejar paso nuevas alternativas que vengan con ganas y con ilusión y, sobre todo, con ganas de defendernos a nosotros, los que estando en España o trabajando fuera somos españoles y con mucho orgullo
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